Luces para una década.
Las luces de baja intensidad para habitación y pasillo es una de los elementos que te recomendamos tener desde el primer día que llegue tu chiquitín del hospital a tu casa. En los primeros días en casa, este tipo de iluminación será utilizada por los padres para atender al bebe, darle el pecho o cambiarle el pañal a las 4 de la mañana sin necesidad encender la luz de la mesilla (escuchando los gruñidos de tu pareja). A la semana de uso habrás amortizado lo que cuesta te lo podemos asegurar, pero una vez que la tengas en casa ya no dejarás de utilizarla por más de 10 años. tu bebé crecerá y llegará ese momento de dejarle solito a que coja el sueño y todas esas fases que son naturales en el crecimiento de tu hijo. La luz de baja intensidad te acompañará en todo ese camino y nunca te faltará una en la habitación del peque o en el pasillo. Llegará el momento de dejar el pañal y de salir de la cama por la noche para ir al baño y si no has tenido una luz de pasillo hasta ese momento, te aseguramos que la adquirirás en ese momento ya que muchos niños a oscuras se desorientan y no llegan a tiempo hasta el inodoro.
Cuando todas esas etapas las hayas superado, no guardes muy lejos tu elemento de iluminación amiga. Llegarán las fiebres, los catarros el Apiretal y la tenue luz necesaria para cuidar a tu chiquitín en esas malas noches.
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